Esta semana fue de una gran desesperación para los ciudadanos de La Pila, pues la falta de agua afectó prácticamente a toda la demarcación y levantó una gran molestia, mientras el actual Delegado Pedro Pablo Cepeda Sierra -como siempre en estos casi tres años- hizo oídos sordos al problema y se irá dejando sólo desatinos a su paso.
Si bien es cierto que el problema se debió a una falla en el pozo que surte a la demarcación, la autoridad delegacional debió gestionar ante el organismo operador del agua potable INTERAPAS, el apoyo con más pipas pues las que existen a cargo de Pedro Pablo son insuficientes.
A lo anterior hay que sumarle que el servicio que debería ser gratuito para la dotación de agua en pipas, se hace de forma selectiva y en muchos casos cobrando el mismo, todo lo que sabe Pedro Pablo, incluso se asegura que la orden para sacar dinero a cambio del agua, es del propio Delegado. Múltiples quejas ha habido al respecto y desde hace muchos meses.
En fin, se irá Pedro Pablo en unos días más y ojalá sea para nunca más regresar, pues al igual que otros Delegados que han estado en La Pila, no sirvieron para maldita la cosa. Llegaron a aprovecharse de los recursos del lugar y no se vio por ningún lado una obra o acción destacada. Fueron un mal adorno que marcó la administración municipal del también saliente Presidente Municipal, el panista Xavier Nava Palacios.
Y hablando de política y de los errores que tuvo el panista y luego morenista, Xavier Nava, su sucesor Enrique Galindo Ceballos, al parecer va por el mismo estilo y no cambiarán las cosas durante su gestión, de acuerdo al nombramiento que está a punto de hacer para el Delegado de La Pila.
Galindo realizó una intensa campaña política abanderado por el PRI, el PAN, el PRD y el Partido Conciencia Popular, asegurando en las tres delegaciones de la entidad: Pozos, Bocas y La Pila, que, aquellos que llegaran a dirigir las demarcaciones serían originarios de cada lugar, compromiso que pronto olvidó el ex jefe de la Policía Federal.
Es prácticamente un hecho que quien llegará como Delegado será Jorge Lozano Soto, hijo del ex Presidente Municipal panista del mismo nombre, aquel que obtuvo más reflectores por haber encabezado un evento donde junto con otras personas quemó públicamente su credencial del PAN, que por sus acciones al frente del Ayuntamiento capitalino.
Con esto, se confirma que pudo más el compromiso político y de grupo con los panistas pudientes y Enrique Galindo, que aquella palabra empeñada con los ciudadanos que le dieron su confianza y creyeron en qué las cosas iban a cambiar, pues con la llegada de otro foráneo a La Pila, no se avizora para nada un buen panorama en nuestra querida comunidad.
Bien dice por ahí que mientras más se conoce a los políticos, más quiere uno a sus perros, pues en estos animalitos si hay al menos lealtad y ellos no fallan a quienes los alimentan y cuidan, mientras que quienes llegan al poder y finalmente dependen y cobran del pueblo, lo traicionan una y otra vez sin ningún remordimiento.
Unos días más pues para que llegue Jorge Lozano Soto a dirigir la Delegación e inicie así una nueva etapa de pan con lo mismo para la ciudadanía. Que en el pecado lleve la penitencia Enrique Galindo Ceballos, por fallarle a la gente de La Pila y ya lo veremos en tres años de nueva cuenta pidiendo el voto y suplicando por el apoyo de la gente. Entonces ahí, habrá que cobrarle la factura al llamado “Maestro”.
