La tradición del Xantolo no descuida a aquellas almas que han sido olvidadas, que no tienen quién las recuerde, quien las honre, o bien, que hayan muerto en desgracia o en trágicos accidentes.
Ayer 18 de octubre, se celebró en la Huasteca potosina la 2da ofrenda del Xantolo, en la cual, se les pide a los dioses del Mictlán o al dios católico que estas almas puedan bajar al mundo de los vivos.
Para esto, se les ofrenda un plato de comida y un vaso de agua en el patio de las casas, acompañados de flores de cempasúchil o de color blanco. De esta manera, tendrán un lugar a donde llegar.
Además, se prende el copal y se marca el camino con cruces y velas, para que las ánimas no se pierdan y lleguen a los altares. Asimismo, en esta fecha se aprovecha para cortar plátanos verdes de sus pencas, con la intención de que estos estén perfectamente maduros en las fechas grandes del Xantolo.
Cabe recordar que el inicio del Xantolo comenzó el 29 de septiembre, donde se realizó la primera ofrenda para que las ánimas bajen. En ese día, se cree que las puertas del inframundo se abren para que los difuntos puedan emprender su largo camino.
