El rector Alejandro Zermeño Guerra dio a conocer en su primer día de labor a quienes conformarán su equipo de colaboradores más cercano. Entre los que destaca la designación de Marco Antonio Aranda Martínez como su secretario general, pese a sus antecedentes de conflicto y traición con sus jefes, como ocurrió en el caso del ex gobernador Fernando Toranzo y el ex alcalde capitalino Ricardo Gallardo Juárez.
La primera reacción en la comunidad universitaria fue que el rector ha echado mano de “cartuchos quemados” y de una chica Tec. María Aurelia de la O Flores, egresada del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores Monterrey, Campus San Luis, será su vocera.
El gran bono democrático con el que el doctor Zermeño asume el poder en la universidad sufrió un fuerte golpe con la designación del secretario general; figura política destacada, tanto en gobiernos del PRI, del PAN y del PRD. Lo que para muchos ha significado un insulto al linaje universitario de gente decente que esperaban acompañarían al rector en el inicio de su administración.
Al abogado Marco Antonio Aranda se le conoce por su conducta clasista, misógina, prepotente y arbitraria; de lo que hay inmensos testimonios de personal del Poder Judicial, donde se desempeño como magistrado por dos periodos.
“El Pachón” tiene en su curriculum político la secretaría general de Gobierno, con el gobernador Fernando Toranzo, quien lo acusa de golpeteo y traición. Toranzo, según testigos, maltrataba en público y maldecía a su colaborador; en venganza, este habría orquestado algunos golpes políticos y mediáticos contra su jefe.
Su traición al ex alcalde Ricardo Gallardo Juárez llegó incluso a tribunales, en donde llegó a negar acciones que el mismo firmó de puño y letra. Su nombramiento no es bienvenido en la comunidad universitaria.
Para el rector Alejandro Zermeño, su secretario general será una carga, no un impulso. Sin embargo, Zermeño permite el regreso a casa, por la puerta grande, de Jorge Alejandro Mascareñas Cuervo, quien tiene base laboral en la estructura universitaria y que trabajó en el área de logística del actual alcalde de la capital. “El Buchis” como se le conoce en la comunidad será el secretario particular del rector.
Raúl Sauceda Macnair ocupará la titularidad de Análisis y Comunicación. También de cepa universitaria, fue secretario particular de Mario García Valdez, ex rector, cuando fue presidente municipal.
Zermeño Guerra mantiene al titular de Finanzas, Ricardo Martinez Guerra, un hombre de prestigio y muy bajo perfil, pero eficiente, según sus críticos. Amaury de Jesús Pozos Guillén será el secretario Académico, es actualmente director de formación de profesores; él sustituye a Lola Lastras, ex aspirante a Rectoría.
La doctora María del Socorro Ruiz Rodríguez asumirá la división de Servicios Estudiantiles; ella actualmente es secretaria general de la Facultad de Estomatología. Urenda Queletzu Navarro Sánchez, catedrática de la Facultad de Derecho, es la defensora de Derechos Universitarios; sobre Urenda habrá muchos reflectores porque tendrá que encabezar una lucha por erradicar la violencia de género en la máxima casa de estudios potosina. Actualmente, Urenda es una de las más importantes luchadoras a favor de los Derechos Humanos en San Luis Potosí.
El rector Zermeño, en su primera rueda de prensa, consideró que el equipo que ha comenzado a integrar tiene varios objetivos iniciales, entre ellos hacer más eficiente la educación a distancia y superar los efectos que la pandemia de coronavirus pueda dejar en la institución. Dijo que cambiará y modernizará a la UASLP, pero que no pondrá en riesgo la estabilidad del Alma Mater con cambio alguno. Aseguró que va a buscar a las mejores personas por que es más fácil hacerse amigo de alguien en el trabajo que designar amigos en algunos cargos, porque “se pierde el amigo y se pierde el cargo”. En una especie de velado perdón por los agravios pasados, señaló que el arquitecto Fermín Villar le entregó una universidad estable con importantes logros académicos. Con información de Código San Luis.