Colectivos feministas de la Ciudad de México y Nuevo León salieron ayer a las calles para exigir justicia por la muerte de la joven Debanhi Susana Escobar.
En la capital del país, diversos colectivos feministas se reunieron en la avenida Insurgentes para manifestarse, mientras que otros grupos lo hicieron en las inmediaciones de la Fiscalía General de la República, donde colocaron imágenes de mujeres víctimas de feminicidio, acompañadas de veladoras, flores y cruces de plantas.
En Monterrey, unas 2 mil personas, en su gran mayoría mujeres, protestaron por el caso de Debanhi y por todas las víctimas de desapariciones y feminicidios que se han registrado en NL.
Durante el recorrido, las mujeres corearon consignas como: “Nuevo León, feminicida”, “No se va a caer, lo vamos a tumbar”; “No fue accidente, fue feminicidio”; “Ni una más, ni una asesinada más”; “No estamos todas, nos faltan un chingo” y “Justicia, justicia”, entre otras.
Los colectivos feministas exigieron la renuncia del secretario de Seguridad, Aldo Fasci Zuazua, y del fiscal general Gustavo Adolfo Guerrero.
“El día de hoy venimos por la convocatoria que hacen las compañeras, estamos aquí para recordarla, para recordar que nos han arrebatado a nuestras compañeras y que hay otras que están desaparecidas”, dijo Araceli Osorio, madre de Lesvy Osorio, asesinada en 2017, durante una protesta en la sede de la Fiscalía General de la República (FGR) de la Ciudad de México. “Esto, esta intervención es efímera, se va, pero nuestras hijas, nuestras familiares, nuestras hermanas no regresan, eso no es efímero. Y no es que desaparezcan, alguien se las lleva, las secuestran”, añadió Osorio, cuya hija fue asesinada y atada a una caseta de teléfono público en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
