El mandatario estadounidense dijo que “ya tiene bajo control el mar” y analiza extender las operaciones contra el narcotráfico; expertos cuestionan la legalidad de los ataques en altamar
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este miércoles que su Gobierno evalúa la posibilidad de lanzar ataques terrestres contra cárteles del narcotráfico en Venezuela, tras una serie de operativos en altamar que han dejado al menos 27 muertos.
“Ciertamente, estamos pensando ahora en la tierra, porque ya tenemos bien bajo control el mar”, declaró el mandatario desde el Despacho Oval, en respuesta a una pregunta de la prensa sobre el eventual uso de fuerza militar dentro del territorio venezolano.
OPERACIONES SECRETAS Y NEGATIVAS AMBIGUAS
Trump evitó confirmar un reportaje del New York Times que sostiene que habría autorizado secretamente a la CIA a realizar operaciones encubiertas en Venezuela contra el gobierno de Nicolás Maduro.
Interrogado directamente sobre si dio permiso a la agencia para “remover” al líder venezolano, el presidente respondió: “Es ridículo hacerme esa pregunta. No es en verdad una pregunta ridícula, pero ¿no sería ridículo que yo la responda?”.
ATAQUES EN ALTA MAR Y CONTROVERSIA INTERNACIONAL
Un día antes, Trump anunció un nuevo ataque contra una lancha que presuntamente transportaba drogas desde Venezuela, en el que murieron seis “narcoterroristas”. Con este operativo, suman al menos 27 fallecidos en las acciones navales estadounidenses recientes.
Diversos expertos en derecho internacional han cuestionado la legalidad del uso de fuerza letal en aguas internacionales contra sospechosos que no han sido detenidos ni interrogados, advirtiendo que tales acciones podrían constituir violaciones al derecho humanitario.
REACCIONES REGIONALES Y POLÍTICAS
El Gobierno de Colombia, encabezado por Gustavo Petro, denunció que algunos de los fallecidos en los ataques estadounidenses en el Mar Caribe serían ciudadanos colombianos.
Al mismo tiempo, legisladores demócratas en Washington exigieron explicaciones a la Casa Blanca y al Pentágono, reclamando transparencia sobre el alcance de las operaciones y las reglas de enfrentamiento aplicadas.
La administración Trump, por su parte, insiste en que las acciones forman parte de una estrategia de “defensa hemisférica” contra el narcotráfico y el terrorismo, mientras aumenta la tensión diplomática con Caracas y sectores de la comunidad internacional observan con preocupación la posible escalada militar hacia territorio venezolano.
