Una madre de familia en la Huasteca potosina enfrenta graves consecuencias físicas y económicas tras ser atacada por un perro propiedad de sus vecinas. A dos semanas del incidente, exige que las responsables cubran los gastos médicos derivados del ataque y asegura haber recibido intimidaciones que complican aún más su situación.
El incidente ocurrió el 9 de noviembre, cuando la joven regresaba a casa y fue sorprendida por el perro, que la mordió en el pie izquierdo, provocándole lesiones profundas. Aunque logró pedir ayuda, las heridas requirieron atención médica inmediata, incluyendo procedimientos para retirar piel dañada. Hasta ahora, ha gastado más de 3 mil pesos en consultas y tratamientos, mientras enfrenta una recuperación que podría tardar más de un mes.
Debido a su incapacidad para trabajar como instructora de spinning y comerciante, su situación económica se ha deteriorado. “Solo quiero que se hagan responsables de los gastos médicos, no estoy exigiendo más”, afirmó. Sin embargo, denunció haber recibido llamadas sospechosas en horarios nocturnos, supuestamente para ofrecerle ayuda, lo que considera un intento de intimidación.
Este caso no es aislado; vecinos reportaron que el perro ha atacado anteriormente a otras personas del sector, aunque estas agresiones no fueron denunciadas por temor a represalias. Ante la falta de acción de las dueñas del animal, la joven acudió a la dirección de Ecología municipal, donde el director Julio César Otero Torres ofreció apoyo para iniciar una queja formal y mediar con las responsables.
Además, la afectada presentó una denuncia penal ante la Fiscalía General del Estado para obligar a las propietarias del perro a responder por los daños causados. Según vecinos, las dueñas han sido descritas como groseras e intimidantes en otros conflictos relacionados con el animal.
La joven madre expresó su preocupación por el impacto emocional que el incidente ha tenido en su familia, especialmente en sus hijos, quienes ahora temen salir y han cerrado sus redes sociales por seguridad. Su principal objetivo es recuperarse y asegurar que este caso no quede impune, con la esperanza de prevenir nuevos ataques en su comunidad.