La venta clandestina de fauna silvestre, incluyendo víboras de cascabel, ha resurgido con fuerza en la localidad de Charco Cercado, perteneciente al municipio de Guadalcázar. En las últimas semanas, se ha registrado un alarmante incremento en el número de puestos que comercian con estos animales, pasando de 10 a 30 en solo un mes.
Entre los ejemplares que se ofrecen de manera ilegal destacan venados y otras especies protegidas por la ley, lo que agrava la situación al poner en riesgo la conservación de la fauna local. Este repunte ha generado preocupación entre defensores del medio ambiente y habitantes de la región, quienes temen por el impacto negativo que esta actividad podría tener en el ecosistema.
Aunque la venta de estas especies está prohibida por las leyes de protección ambiental, los comerciantes continúan operando de manera abierta. La comunidad exige una intervención urgente por parte de las autoridades para frenar este comercio ilegal y asegurar la preservación de las especies en peligro.
