Comerciantes del Mercado Hidalgo en el Centro Histórico de San Luis Potosí han reportado bajas ventas en las vísperas de Navidad, principalmente debido a la presencia de vendedores ambulantes y la falta de estacionamiento cerca del centro de abasto. Aunque algunos optaron por no sacar sus mercancías a la calle como en años anteriores, el ambiente sigue siendo desfavorable para los locatarios.
Desde hace tiempo, el mercado ha enfrentado la competencia de los comerciantes en la vía pública, que ofrecen productos similares a los de los locales, lo que ha reducido la afluencia de compradores dentro del inmueble. Esto motivó la creación de la “Expo-Navideña”, una protesta en forma de venta en la calle, que surgió por la creciente competencia desleal.
Los vendedores lamentaron que, a diferencia de años anteriores, no hubo una organización de la Unión de Locatarios ni estrategias de apoyo por parte de los directivos para atraer más clientes, como sucedió en administraciones pasadas. A pesar de los esfuerzos de algunos comerciantes por sacar parte de su mercancía, la presencia de inspectores municipales y las promesas incumplidas de promocionar los locales en redes sociales afectaron aún más sus ventas. Muchos de los locatarios, principalmente adultos mayores, carecen de conocimientos tecnológicos para hacer publicidad efectiva de sus productos.
Además, la falta de estacionamiento en el área y la saturación de los parquímetros dificultan que los compradores accedan al mercado. Los pocos cajones disponibles son ocupados en su mayoría por lavacoches, lo que incrementa la frustración entre los clientes. Los comerciantes informan a quienes logran llegar de los estacionamientos públicos cercanos, pero esto no ha sido suficiente para mejorar la afluencia de clientes.