Tras la reciente aprobación de la despenalización del aborto por el Congreso de San Luis Potosí, el sistema de salud estatal ha declarado estar listo para brindar el servicio de Interrupción Legal del Embarazo (ILE) en hospitales y clínicas públicas. La directora de los Servicios de Salud, Elizabeth Dávila Chávez, informó que las instalaciones cuentan con insumos, médicos capacitados y el equipo necesario para atender a quienes soliciten el procedimiento, cumpliendo así con el nuevo marco legislativo.
La red de atención incluye cuatro Hospitales Generales, ocho Hospitales Básicos Comunitarios y diversas unidades de alta especialidad. Dávila Chávez destacó que los quirófanos y las salas de expulsión están equipados para garantizar un procedimiento seguro, y que el personal médico ha recibido capacitación específica para realizar ILE con los protocolos adecuados.
La reforma elimina las sanciones previas de uno a tres años de prisión para quienes accedieran al aborto. Sin embargo, aún se esperan lineamientos sobre la objeción de conciencia del personal médico. Mientras tanto, colectivos feministas han asegurado que vigilarán el cumplimiento efectivo de esta ley, mientras que algunos grupos religiosos y civiles han expresado su desaprobación, reflejando la diversidad de opiniones que sigue presente en el debate social potosino.