La Calzada de Guadalupe, una de las áreas emblemáticas de San Luis Potosí, está experimentando una importante transformación urbana como parte del proyecto de regeneración del Paseo Esmeralda. Estas obras, que están siendo ejecutadas en coordinación con el Instituto Nacional de Antropología e Historia, buscan preservar los vestigios históricos mientras se moderniza la infraestructura de la zona.
Una de las principales metas del proyecto es la eliminación del cableado aéreo, que será trasladado a instalaciones subterráneas para mejorar la estética del área. Durante una reciente visita de supervisión, el Alcalde Enrique Galindo verificó el avance de los trabajos y confirmó que todo marcha conforme a lo previsto.
La Dirección de Obras Públicas informó que el avance en el lado poniente, que abarca desde la calle Pascual M. Hernández hasta Valentín Gómez Farías, es del 80 por ciento. En esta sección, se han instalado 575 metros de nueva red de agua potable y otros 575 metros de drenaje sanitario. También se han colocado 610 metros de nuevos bordillos y se han labrado 4 mil metros cuadrados de adoquín. Además, se han realizado obras de preservación en una superficie de mil 185 metros cuadrados y se han construido 750 metros cuadrados de banquetas de cantera.
La colaboración con Telmex, la CFE y empresas de cable ha sido crucial para el soterramiento de 355 metros de cableado.
Para la sección oriente de la Calzada de Guadalupe, se tienen programados trabajos que incluyen el labrado de 2 mil 400 metros de adoquín, la construcción de mil 650 metros de banquetas con acabados de cantera, el soterramiento de 355 metros adicionales de cableado y la mejora integral del sistema de alumbrado.
