Se relaciona con una organización criminal de Hong Kong. El fentanilo es la droga más vendida en EU y la más rentable en México para los cárteles.
Una red para la elaboración de precursores químicos, con una gran capacidad para la elaboración de fentanilo, con operación en los estados de Durango, México y la Ciudad de México, fue desmantelada mediante la “Operación Blue”, informaron la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de Marina (Semar).
Lo asegurado y los narcolaboratorios desmantelados estarían relacionados con una organización criminal con base en Hong Kong, China. El titular de la Coordinación de Métodos de Investigación de la FGR, Felipe de Jesús Gallo Gutiérrez, detalló que dichas acciones llevaron a la detención del presunto propietario de los narcolaboratorios, identificado como Roberto “Q”, así como al responsable de su operación, Salvador “C”.
Este último fue hallado en un domicilio ubicado en la alcaldía Iztapalapa, donde se aseguró fentanilo, así como un contenedor con polvo blanco y 500 gramos de cocaína. El funcionario indicó que en el Valle de Chalco, Estado de México, se localizaron volúmenes considerables para almacenar precursores químicos para producir mentafetamina y fentanilo.
“Al ingeniero responsable de la compra de los precursores, la elaboración de las fórmulas, la creación de los laboratorios y la operación de los mismos, de nombre Salvador ‘C’ detenido en la alcaldía Iztapalapa de la Ciudad de México en donde se aseguró un laboratorio clandestino dedicado a la elaboración de fentanilo”, dijo Gallo Gutiérrez en conferencia de prensa.
En los domicilios de Chalco se encontraron reactores con más de 5,000 kilos de capacidad para procesar metanfetamina y fentanilo, maquinaria de la cual no existía precedentes, agregó Gallo. Las investigaciones permitieron a las autoridades ubicar a la organización criminal transnacional, insistió.
El director de Difusión y Medios de la Unidad de Comunicación Social de la Secretaría de Marina-Armada de México, detalló que las investigaciones llevaron a la intercepción de contenedores con los precursores, durante un operativo en el puerto de Ensenada, Baja California. El cargamento partió del puerto de Yokohama, Japón, y tenía como destino direcciones de empresas en Alaska, así como a las ciudades de Guadalajara y Puebla.