ZARAGOZA. – Este verano se está convirtiendo en una experiencia verdaderamente inolvidable para las niñas y niños de Zaragoza, gracias a las actividades del programa “Mi Verano en la Biblioteca”, una iniciativa educativa y recreativa que busca fomentar el aprendizaje y la creatividad en un ambiente de sana convivencia.
Durante la jornada más reciente, las y los pequeños participantes dieron rienda suelta a su imaginación a través de una actividad de pintura colectiva, en la que crearon una obra de gran formato que llenó de color y entusiasmo las instalaciones de la Biblioteca Municipal.
Pinceles, risas y mucha imaginación fueron los ingredientes de esta experiencia, en la que cada trazo y cada color reflejaron no solo el talento innato de la niñez zaragozanos, sino también su alegría por participar en espacios seguros, culturales y llenos de oportunidades para expresarse.
Los organizadores del programa destacaron que esta actividad fue diseñada no sólo como una herramienta artística, sino también como una forma de reforzar valores como el trabajo en equipo, la libertad de expresión y el respeto por las ideas de los demás.
“Cada niño y niña aportó algo único a esta pintura gigante, y eso es precisamente lo que buscamos: que sepan que su voz y su visión del mundo tienen un valor”, comentaron responsables del programa.
Con programas como “Mi Verano en la Biblioteca”, se demuestra que el arte y la cultura no son un lujo, sino una herramienta poderosa de transformación social, especialmente cuando se ponen al alcance de las nuevas generaciones.