Jacqueline Alejandra Camacho Arriaga, ahora exdirectora del Instituto Potosino de la Juventud (Inpojuve), denunció que el pasado viernes por la mañana, Joaquín García Martínez titular del Instituto Potosino de Cultura Física y Deporte (Inpode), acompañado por otros nueve hombres, arribó a la sede del IPJ para “amedrentar” al personal que laboraba en el lugar.
Además, sustrajeron a la fuerza la grabadora de video de las cámaras de vigilancia y el reloj checador, también exigió las claves de las cuentas bancarias y se llevó documentación.
Al llegar al sitio, la titular del IPJ fue informada por García Martínez de que estaba destituida y que ya no podía ingresar al inmueble. Según él, la orden provenía de la directora de Recursos Humanos de la Oficialía Mayor, Jessica Falcón Compeán.
Camacho Arriaga señaló al Oficial Mayor, Noé Lara Enríquez, que García Martínez no tenía facultades para destituirla y recordó que ya había sido víctima de una agresión por parte del funcionario durante un evento celebrado el pasado 27 de septiembre con la senadora Ruth González.
La funcionaria solicitó al Oficial Mayor la apertura de una carpeta de investigación contra García Martínez y sus colaboradores, algunos de los cuales, según indicó, cobran en la nómina del IPJ pero no se presentan a laborar.
Los actos del funcionario fueron notificados al titular de la Oficialía Mayor del gobierno estatal, Noé Lara, mediante un oficio entregado el lunes, de acuerdo con el sello de recibido del documento.
Noé Lara Enríquez, titular de la Oficialía Mayor, consideró que Jacqueline Alejandra Camacho Arriaga, exdirectora del Instituto Potosino de la Juventud (Inpojuve) se “alteró un poquito” en la denuncia que hizo contra Joaquín García Martínez, titular del Instituto Potosino de Cultura Física y Deporte (Inpode).
Lara Enríquez afirmó que se investigará y procederá conforme a derecho, sin embargo, confió en que la situación no haya sido como refiere la ahora exfuncionaria dado que a veces “nos alteramos y ahora sí que tenemos momentos emotivos”, justificó.
Aseguró que no se destituirá a García Martínez y minimizó la denuncia al estimar que no pasará a mayores, porque en la política “hay códigos de ética donde debe de prevalecer el respeto entre los trabajadores de un gobierno”.
“Posiblemente se haya alterado un poquito la licenciada Jacqueline. A mí me llegó una comunicación por escrito por parte de ella en la que me hace saber determinados hechos, los cuales desde luego van a ser investigados y de existir alguna responsabilidad se actuará conforme a derecho”, concluyó.
Aparte, el gobernador Ricardo Gallardo Cardona dijo que la acusación de la exfuncionaria en contra de García Martínez es un tema personal, no institucional.