Guillermo «N», responsable del feminicidio de Guadalupe Viramontes Cruz, podría salir de prisión después de cumplir apenas un año y siete meses de su condena. A pesar de haber estado prófugo durante 10 años, su pena original, que era de 18 años, se redujo inicialmente a tres y ahora podría verse aún más reducida debido a “buena conducta” y trabajo comunitario.
Lupita fue asesinada el 29 de junio de 2012, a la edad de 15 años. Guillermo, quien también tenía 15 años al momento del crimen, fue capturado en febrero de 2023 tras una década de permanecer en la clandestinidad. La reciente resolución judicial ha permitido que, tras menos de dos años en prisión, Guillermo esté en vías de quedar en libertad, lo que ha generado indignación entre la familia de la víctima y diversos colectivos.
Los familiares de Lupita han expresado su consternación ante esta situación, señalando que la decisión no solo desestima el sufrimiento de la víctima, sino que también pone en riesgo su propia seguridad. Denuncian que el sistema judicial está fallando en garantizar justicia y protección para las víctimas y sus familias.
Organizaciones feministas han alzado la voz en contra de la resolución, criticando la reducción de la pena como un claro ejemplo de impunidad. En su opinión, el sistema de justicia está priorizando los derechos de los agresores en lugar de salvaguardar la memoria y el derecho a la justicia de las víctimas.
Por su parte, la fiscal General del Estado, María Manuela García Cázares, anunció que la Fiscalía impugnará la decisión judicial, argumentando que existen inconsistencias en la sentencia y que la liberación prematura de Guillermo debe ser reconsiderada. La fiscal aseguró que se están tomando las medidas necesarias para intentar revertir la resolución.