El lamentable asesinato de Fredy Suárez, un joven de 24 años de origen estadounidense ha conmocionado a la comunidad de San Rafael, en Tierra Nueva, San Luis Potosí. Los hechos ocurrieron durante la fiesta patronal del lugar, donde una riña que parecía haber terminado derivó en un violento ataque que le costó la vida. En medio de la oscuridad y la falta de seguridad, Fredy fue atacado por la espalda con un arma blanca, sufriendo heridas letales.
Tras el ataque, amigos intentaron auxiliarlo trasladándolo en vehículos particulares al centro de salud de Tierra Nueva. Sin embargo, este no contaba con médico ni ambulancia, lo que los obligó a dirigirse a Santa María del Río, donde las condiciones eran similares. Lamentablemente, Fredy falleció durante el traslado, sin haber recibido atención médica adecuada. Esta tragedia pone en evidencia la falta de infraestructura básica en la región, situación que ha indignado a la población.
A más de una semana de los hechos, los familiares de Fredy denuncian la falta de avances en la investigación por parte de la Fiscalía del Estado. Según relatan, han sido ignorados o tratados con indiferencia por las autoridades. Exigen una respuesta inmediata de la alcaldesa de Tierra Nueva, Pily Sánchez, del gobernador Ricardo Gallardo Cardona, y del gobierno estadounidense, para garantizar que este caso no quede impune y se castigue a los responsables.
Fredy, descrito como un joven emprendedor con un negocio de paquetería internacional, fue velado en Tierra Nueva y posteriormente trasladado a Houston, Texas, donde fue sepultado. Su familia pide justicia y solicita el apoyo de la sociedad para presionar a las autoridades. Este caso no solo es un llamado a resolver un crimen, sino también a mejorar las condiciones de seguridad y salud pública en comunidades vulnerables como San Rafael.
