El presidente Donald Trump y la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, acordaron este jueves una prórroga de 90 días sobre nuevos aranceles antes anunciados para el 1 de agosto. La medida mantiene las tarifas actuales: 25 % sobre automóviles y bienes relacionados con fentanilo, 50 % sobre acero, aluminio y cobre.
La conversación fue descrita por ambos mandatarios como “muy productiva”. Trump destacó la necesidad de más tiempo para negociar, mientras Sheinbaum se congratuló de haber evitado un aumento inmediato y aseguró que México preserva su acceso preferencial bajo el T-MEC.
Durante la negociación, México aceptó la eliminación de barreras no arancelarias como parte del compromiso para avanzar hacia un acuerdo integral. Se mantendrá la cooperación en temas fronterizos y seguridad durante el periodo de pausa.
Analistas consideran que la medida evita impactos económicos inmediatos, da estabilidad a las exportaciones mexicanas y ofrece tiempo para negociar un arreglo más duradero, mientras se consolidan mecanismos de confianza mutua entre ambas naciones.