Un grupo armado irrumpió la madrugada de este viernes en un centro nocturno a las afueras de la capital potosina, donde, tras efectuar disparos y agredir a clientes, provocó un incendio que redujo a cenizas buena parte del establecimiento. Autoridades estatales atribuyen el ataque a una posible disputa relacionada con el cobro de piso entre grupos del crimen organizado.
Según los primeros reportes, los agresores se hicieron pasar por clientes antes de iniciar la agresión en el antro denominado Amnesia, ubicado sobre la carretera 57. Una vez en el interior, comenzaron a disparar contra el mobiliario, sembrando el pánico entre los presentes.
Testigos señalaron que varios clientes y empleados buscaron refugio bajo las mesas o en los sanitarios mientras se desataba el caos. Posteriormente, los atacantes rociaron gasolina en diversas zonas del inmueble y le prendieron fuego antes de huir del lugar.
Elementos de la Guardia Civil Estatal y bomberos metropolitanos acudieron al sitio para controlar el siniestro. Pese a lo aparatoso del ataque, las autoridades confirmaron que no se registraron personas fallecidas ni lesionadas de gravedad, aunque los daños materiales son cuantiosos, con mobiliario y parte del inmueble completamente calcinados.
La Fiscalía General del Estado informó la apertura de una carpeta de investigación para determinar el móvil del ataque y dar con los responsables. Por su parte, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del Estado y Protección Civil clausuraron el establecimiento como medida preventiva.
En tanto, efectivos del Ejército Mexicano y de la Guardia Nacional desplegaron un operativo en el tramo carretero donde se ubica el local, con el objetivo de reforzar la seguridad en la zona.
Fuentes de seguridad consultadas indicaron que el ataque estaría vinculado a una pugna entre células del crimen organizado que operan en San Luis Potosí, específicamente por el control del cobro de piso. En la entidad, se tiene identificado al menos a cuatro grupos delictivos con presencia activa, dedicados también al narcomenudeo y la trata de personas.
Este nuevo episodio de violencia ocurre en un contexto de creciente tensión en el estado, donde los grupos criminales mantienen una lucha constante por el control de actividades ilícitas.