Como parte del programa “Grano para el Bienestar del Campo”, la Secretaría del Bienestar Municipal de la Capital, bajo el alcalde Enrique Galindo Ceballos, entregó maíz molido a apenas 25 productores ganaderos de la comunidad de Jaralito, en la Delegación La Pila. Cada beneficiario recibió 175 kilos para alimentar a su ganado, en un acto que se presume como respaldo a las familias rurales.
Aunque la delegada municipal, Daniela Cid González, destacó la importancia del apoyo, al calificarlo como un alivio frente a los altos costos del alimento para el ganado, persisten cuestionamientos sobre el verdadero impacto del programa: el número reducido de beneficiarios refleja un alcance limitado frente a las necesidades de la región, donde son cientos los productores que requieren apoyo urgente.
Por su parte, el Secretario de Bienestar Municipal, Edmundo Torrescano Medina, prometió más programas para la demarcación, aunque sin detallar plazos, montos ni criterios de selección, lo que abre dudas sobre la transparencia y continuidad de estas iniciativas.
Vecinos y productores han manifestado su preocupación ante la posibilidad de que este tipo de programas respondan más a fines mediáticos que a soluciones de fondo para la crisis que enfrenta el campo, marcada por sequías, altos costos y falta de apoyos consistentes. Se espera que el Gobierno Municipal aclare el presupuesto total del programa y los mecanismos para garantizar que los recursos lleguen a más familias rurales.