El Congreso de Jalisco aprobó la despenalización del aborto antes de las 12 semanas de gestación, permitiendo a las mujeres acceder a servicios de salud estatales para interrumpir voluntariamente su embarazo sin riesgo de enfrentar sanciones penales. Después de este período, las sanciones podrán sustituirse por un “proceso de atención integral”.
En una sesión plenaria celebrada el viernes, mediante votación secreta solicitada por la legisladora Susana de la Rosa, 20 de los 37 diputados presentes votaron a favor de reformar el Código Penal del estado para acatar un mandato judicial de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. La corte había declarado inconstitucionales los artículos 228 y 229 del Código Penal, que imponían penas de prisión de cuatro meses a un año por interrumpir el embarazo.
La reforma aprobada establece que, tras las 12 semanas de gestación, las mujeres que decidan interrumpir su embarazo podrán evitar la prisión si optan por un proceso de atención integral, el cual será proporcionado por instituciones estatales. Además, se estipulan penas de tres a seis años de prisión para quienes interrumpan el embarazo de una mujer sin su consentimiento, con agravantes en casos de violencia.
La legislación también excluye de responsabilidad penal los casos en los que el aborto sea producto de una violación, abuso sexual infantil, inseminación artificial no consentida, o cuando la vida o salud de la mujer esté en riesgo, así como por malformaciones genéticas del feto, siempre que exista consentimiento.
Este cambio en la legislación llega después de una votación fallida inicial, en la que 18 legisladores votaron a favor, 18 en contra y uno se abstuvo, lo que prolongó el proceso de despenalización.