Por: El Jofrito
En días pasados se celebró la posada del PVEM, a la cual fue invitado y estuvo presente el exalcalde, el profe Rubén Rodríguez Rodríguez, quien luego d haber terminado su periodo, se dio un tempo para la reflexión y ya ha estado en varios eventos públicos, donde ha acaparado los reflectores, la verdad es que goza de una buena dosis de simpatía entre la población, pero quien sabe si pueda tener en mente continuar en la política, pero, por las señales que se han percibido, bueno, pues bien cabe aquí una reflexión sobre esa trillada frase que dice; “Los muertos que enterrasteis gozan de cabal salud”, claro, estamos seguros que las críticas van arreciar conforme pase el tiempo, pero, como dice también otra trillada frase; la historia pondrá a cada uno en su lugar. No se trata de lograr tener el poder por solo hecho de tenerlo, sino para ponerlo al servicio de los demás. Lo hemos señalado ya en varias ocasiones, lo que debe importar es en buscar el beneficio para el desarrollo del pueblo, que, igual lo hemos señalado, pareciera estar condenado a seguir en el olvido, no parece haber algún interés verdadero de sacarlo adelante, poner lo mejor de cada uno y hacerlo pujante, vigoroso. Hay ahora más oportunidades, comienzan a llegar rutas de autobuses para el traslado de trabajadores a la zona industrial, principalmente de Villa de Reyes, en el parque Logistik.
Un mal mensaje fue el enviado desde la capital potosina, donde resulta que Sara Rocha se reeligió como mandamás del PRI, donde echaron por tierra la candidatura de la planilla oponente, para dejarle el camino libre a Sara Rocha, Margarita Hernández Fiscal fue la única contrincante, la mujer que pese a ser consejera, no le fue permitido entrar a las sesiones. Decimos que fue un menaje pésimo el que fue enviado desde la capital potosina, porque eso deja en claro que el PRI continua con sus artimañas que lo han ensuciado, dejan de lado las voces de sus militantes solo para lograr un beneficio de grupúsculos que, con sus acciones simplemente proyectan la falta de respeto por lo que piensa la base militante, eso les ha costado mantenerse en prácticamente el último lugar de las preferencias de los electores y., en un plazo no muy remoto dejar de existir, pues con solo monólogos no van a despertar conciencias, eso se pretende aplicar aquí y, eso definitivamente no es nada bueno, menos cuando no se ve por donde puedan llegar los recursos. La inercia no es buena consejera, pero también hay que creer que no se cuenta con una buena disponibilidad de apoyo. Solo baste recordar lo sucedido en Zaragoza, donde simplemente el entonces alcalde, Emmanuel Díaz Loredo, quien durante su campaña prometió la perlas de la virgen y prácticamente nada hizo, poque, hay que recordarlo, no recibió apoyo ni de las autoridades estatales ni federales, aunque realizó varios viajes, para entrevistarse con el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador, simplemente se la pasó con puras promesas los tres años, al final no tenía dinero ni siquiera para pagar los finiquitos. Mal, l verdad es que le fue muy mal al llamado “Piloto”, quien entró con muchas ganas y prácticamente nada de recursos, lo cual fue provechado por quienes fueron sus declarados enemigos políticos. Incluso no ocultó su deseo de dedicarse de lleno a la política, pero el rechazo de la gente lo ubicó en su real dimensión; les falló yeso tuvo un fenomenal costo político.
Quisimos tocar de refilo el tema de Zaragoza, para exponer que remar o nadar contra la corriente no resulta ser siempre la mejor decisión, más aún cuando hay tantas cosas por hacer e este pueblo donde se requiere mucha infraestructura, tanto en cabecera como en las localidades, principalmente de la sierra. Bueno, ya, ahora sí, la de cajón: ¡Feliz Navidad!