México derrotó 2-1 a Estados Unidos este domingo en el NRG Stadium de Houston, adjudicándose la final de la Copa Oro 2025. El encuentro, que comenzó con ventaja temprana para el cuadro estadounidense, se definió gracias a la superioridad táctica y la experiencia del equipo tricolor. La final marcó el retorno de México al trono regional tras seis años sin ganar de manera oficial. El resultado representa una victoria clave de cara al Mundial 2026.
El primer gol llegó apenas al minuto 4, cuando Chris Richards aprovechó un desajuste en la defensa mexicana y cabeceó un tiro libre al fondo de la red. Aunque el gol sorprendió, el Tri respondió con mayor posesión y presión ofensiva. Pese a la desventaja, México no se quebró y siguió construyendo con calma su camino hacia la remontada.
Raúl Jiménez igualó el marcador al minuto 27, tras recibir un pase filtrado de Gilberto Mora y definir con precisión. Jiménez dedicó su anotación a su compañero Diogo Jota, fallecido recientemente, con un emotivo homenaje que calmó nervios en la nación mexicana. El empate reflejó la respuesta fiel de México ante el duro golpe inicial.
El gol del triunfo fue obra de Edson Álvarez al minuto 77, quien cabeceó un tiro libre tras revisión del VAR. La anotación selló la remontada del equipo azteca y confirmó su décimo título en el torneo. El arquero Luis Malagón también fue protagonista al desviar un remate crucial en el tiempo añadido.
Con esta victoria, México reafirma su liderazgo en la región y consigue su décimo trofeo en la competencia. El duelo sirvió de prueba de fuego previo al Mundial 2026 y dejó claro que el equipo dirigido por Javier Aguirre se mantiene competitivo. Aunado a la celebración, quedan reflexiones sobre la fortaleza mental y táctica demostrada en momentos de alta presión.