La Secretaría de Economía y el CCE coordinarán foros y mesas de trabajo con más de 30 sectores productivos del país
El Gobierno de México puso en marcha este miércoles la preparación para la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), prevista para 2026. La Secretaría de Economía, con el respaldo del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), arrancó el 30 de septiembre un proceso de consultas con 30 sectores productivos para definir la postura nacional frente al acuerdo.
CONSULTA AMPLIA E INCLUSIVA
El titular de Economía, Marcelo Ebrard, destacó que no se trata de un análisis técnico exclusivo, sino de un ejercicio que busca integrar las prioridades de la iniciativa privada, del sector obrero y de las 32 entidades federativas.
Durante octubre se llevarán a cabo foros estatales respaldados por los Comités Promotores de Inversión, así como mesas de trabajo en la sede de la Secretaría de Economía. El objetivo es que ningún sector quede fuera del proceso y que México llegue “mejor preparado como país” a la revisión del tratado.
VISIÓN DEL SECTOR PRIVADO
El presidente del CCE, Francisco Cervantes, afirmó que la revisión del T-MEC representa una oportunidad para consolidar la competitividad de México y robustecer la integración de sus cadenas productivas en América del Norte.
Los sectores involucrados abarcan desde vehículos pesados, autopartes y acero, hasta agroindustria, farmacéutica, turismo e industrias creativas. También participan minería, energía, textil, aeroespacial, electrónica y servicios financieros, entre otros.
AMPLIA PARTICIPACIÓN EMPRESARIAL
En el arranque del proceso estuvieron presentes representantes de la Concamin, el Consejo Mexicano de Negocios, la Canifarma, la Camimex, la AMIA, la Canieti y la Canacero, además de líderes de las industrias química, papelera, láctea, aeroespacial y del autotransporte.
El acuerdo establece un mecanismo reforzado de acompañamiento entre la Secretaría de Economía y el CCE, con el fin de garantizar una representación plural y equilibrada en las negociaciones que definirán el futuro del tratado.












