El Monterrey comenzó su participación en el Mundial de Clubes con un empate 1-1 frente al Inter de Milán en el Grupo E, gracias a un gol tempranero de Sergio Ramos y una destacada actuación del portero Esteban Andrada y otro empate a ceros contra el River Plate de Argentina para asegurar su segundo punto del torneo. Este resultado mantiene vivas sus aspiraciones de avanzar, con un duelo pendiente ante el Urawa Red Diamonds en la próxima jornada.
Por su parte, Pachuca arrancó con una derrota 2-1 ante el RB Salzburg el miércoles, tras los goles de Oscar Gloukh y Karim Onisiwo, y una anotación de Bryan González para los tuzos, en un partido que incluyó una pausa por fuertes lluvias. El equipo hidalguense siguió con otra derrota por 3-1 frente al Real Madrid, pese a haber quedado en inferioridad numérica por la expulsión temprana de Raúl Asencio.
Tanto Monterrey como Pachuca enfrentan el desafío de competir contra equipos europeos de alto nivel y también gigantes de otras confederaciones. Monterrey mantiene una posición competitiva con dos empates y esperanzas de avanzar a la siguiente ronda, mientras Pachuca, con la derrota de hoy, quedó prácticamente eliminado.
Esta edición del Mundial de Clubes, la primera con formato de 32 equipos evidencia la brecha entre las plantillas mexicanas y sus homólogas europeas. Aun así, Monterrey ha renovado confianza tras su sólido desempeño defensivo, mientras Pachuca buscará recuperar su prestigio histórico en futuras competencias internacionales.