A cinco meses de iniciado 2025, los 59 municipios de San Luis Potosí no han recibido los recursos correspondientes al Ramo 33, una de las principales fuentes de financiamiento para obras y programas sociales municipales. Este retraso, sin explicación oficial por parte del Gobierno Federal encabezado por Claudia Sheinbaum, ha generado incertidumbre y preocupación entre autoridades locales y la población, comprometiendo el funcionamiento básico de los gobiernos municipales y la ejecución de proyectos prioritarios.
La falta de estos fondos ha afectado la operación de servicios esenciales como mantenimiento de calles, recolección de basura, programas de apoyo social y acciones de seguridad pública. Algunos municipios han tenido que recurrir a la contratación de créditos para evitar el colapso de sus administraciones.
El Ramo 33 incluye fondos federales como el Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS), destinados a atender necesidades fundamentales como infraestructura educativa, salud, seguridad pública, desarrollo social y fortalecimiento municipal. En 2024, San Luis Potosí recibió por este concepto un total de dos mil 824 millones 456 mil 199 pesos, distribuidos conforme a la ley. Sin embargo, este año no se ha informado oficialmente el motivo del retraso ni se ha establecido una fecha clara para la entrega de los recursos.
La situación se agrava por una disminución en la recaudación federal, lo que ha generado un ajuste en el fondo de participaciones destinado tanto a los municipios como al estado de San Luis Potosí. La titular de la Secretaría de Finanzas, Ariana García Vidal, explicó que este ajuste afecta a los 59 municipios y al estado, sin sesgo partidista, y llamó a la solidaridad de las autoridades locales para enfrentar la situación. El ajuste negativo, inédito en su magnitud, se realiza cuando un mes anterior se ha ministrado un monto en exceso, obligando a la Federación a corregir la distribución en el siguiente periodo.
Ante este panorama, los municipios potosinos enfrentan desafíos significativos para mantener la prestación de servicios y la ejecución de proyectos, en un contexto de creciente demanda social y económica.