Tras el asesinato de María del Carmen y su hijo Jaime Daniel, ocurrido el pasado miércoles en Tlajomulco, Jalisco, la presidenta Claudia Sheinbaum hizo un llamado a las autoridades a realizar una investigación profunda y sin simulaciones. María del Carmen formaba parte del colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco y había participado en el hallazgo de un presunto centro de adiestramiento del crimen organizado en el Rancho Izaguirre.
“Es muy lamentable (…) nuestra solidaridad a todos los familiares de las personas desaparecidas y en particular este trágico acontecimiento”, expresó la mandataria federal durante su conferencia, luego de leer una carta enviada por el colectivo, en la que se le solicitó su intervención directa ante la Fiscalía estatal.
La Fiscalía de Jalisco informó que, hasta el momento, no existen indicios que vinculen el crimen con la labor de búsqueda de María del Carmen. Sin embargo, colectivos de familiares de desaparecidos han cuestionado esa postura y exigen que no se descarte ninguna línea de investigación.
En su posicionamiento, Sheinbaum insistió en que el caso debe esclarecerse: “Vamos a estar atentos y tiene que investigarse realmente a fondo de por qué ocurrió este hecho, si fue por la labor de búsqueda que estaba haciendo o no, pero que sea una investigación a fondo”.