Ante la severa escasez de agua que enfrenta la capital potosina, la Universidad Autónoma de San Luis Potosí presentó un plan integral sustentado en estudios científicos para optimizar el uso del recurso. El rector Alejandro Zermeño advirtió que actualmente se pierde cerca del 45% del agua en la red por fugas en infraestructura obsoleta, algunas con más de 70 años en servicio.
El proyecto universitario plantea la sectorización del servicio, es decir, dividir la distribución en zonas que se abastezcan de pozos cercanos con monitoreo técnico, garantizando que al menos el 90% del agua extraída llegue a los hogares. Esto reduciría significativamente las pérdidas, que actualmente representan un enorme desperdicio económico y operativo para los sistemas de agua.
Pese a contar con estudios y diagnósticos en ingeniería hidráulica, geología y química, la UASLP ha recibido escasa atención por parte de las autoridades. Zermeño lamentó que los retrasos sean más políticos que técnicos, y recordó que medidas como el ajuste tarifario o la modernización de la red siguen sin aplicarse a pesar de su urgencia.
También se señaló el desaprovechamiento de las plantas tratadoras: de 40 existentes en la capital, solo unas cinco funcionan, lo que limita su uso en actividades como riego o limpieza. Finalmente, Zermeño destacó que la propia universidad ha adoptado prácticas de ahorro en sus instalaciones, modelo que podría replicarse a nivel doméstico para generar un efecto positivo en toda la ciudad.
