Por: María Luisa Paulín
Del amor al odio, decían los abuelos, sólo hay un paso y al revés, pero en la política mexicana es prácticamente suicida intentar acuerdos políticos con el movimiento gobernante.
Los morenos son como las plantas carnívoras, se alimentan de insectos y para obtener nutrientes, utilizan néctar dulce con promesas de futuro, hojas pegajosas o trampas de bisagra. Al final, fieles a su naturaleza, traicionan, se agandallan posiciones y trepan al poder que los trastorna aunque ese poder sea mínimo.
En San Luis Potosí nunca han podido convivir con otras fuerzas, de hecho tampoco entre ellos se toleran. Cuando no se propinan patadas por debajo de la mesa, se hacen guerras sucias, se alían con los contras para anular a los militantes de avanzada y es así que han disfrutado de las mieles del poder desde hace siete años.
En San Luis Potosí morena es una fuerza mediocre. Si acaso, se unen cuando viene Claudia Sheinbaum para hacerle creer a la presidenta que existe un rechazo contra el gobernador Ricardo Gallardo pero de gritones no pasan. Se volvieron flojos y renegones.
Ya son parte del show los enfrentamientos a gritos, tipo porra, durante las estancias de la presidenta en territorio del potosí, pero esa potencia pulmonar que presumen en los eventos, no se traducen en votos a la hora de las elecciones ni en afiliados al momento de realizar asambleas para construir comités seccionales donde, si acaso, dos o tres son verdaderos militantes morenistas.
Asuzados por la dirigente estatal, Rita Ozalia, -impuesta como dirigente por segundo periodo consecutivo gracias a su hermana, Rosa Icela Rodríguez- en la visita de Sheinbaum a San Luis Potosí para el mitin de primer informe de la presidenta, los morenos gritaron más que nunca y se puede decir que hubo un empate técnico con los verdes que coreaban “pollo, pollo”.
Toda multitud es plebe, diría el cacique potosino, Gonzalo N. Santos y sí, cualquiera en el anonimato del gentío se desgañita y eso es parte de la decoración política de la década, pero los que le saben a la política mexicana saben que en la cuatroté, mas que en el pasado prianista, las decisiones importantes se toman en México, concretamente en la oficina de la presidenta, que ha resultado mas canija que bonita.
Lo que suceda en el 2027 no contempla gritos de hordas morenistas o verdes, si acaso, les lanzarán migajas y tendrán que conformarse porque no han trabajado el futuro y en cambio traen nidos de corrupción en los programas sociales, de vivienda, en la SCT, salud y ya ni se diga en conagua.
La mayoría de quienes ostentan algún cargo olvidaron principios y metas, solo quieren acumular dinero mal habido, sustraído de programas del gobierno y de grupos delictivos.
Como sea, verdes y morenos de a pie tendrán que conformarse con hacer siempre lo mismo porque es mentira que en morena caben todas y todos, las oportunidades son para aquellos que ofrezcan negocios, dinero y oportunidades de vivir como fifís con careta de austeros.
No se calienten planchas que hay mucha ropa en el tendedero y, puede creerse o no, pero la relación Sehinbaum – Gallardo, atraviesa un buen momento, si se descompone mas adelante, ese será otro cantar.
P.D.1.- Tenemos noticias de que en Ciudad Valles funcionarios municipales y mandaderos del Gobierno del Estado se han agandallado hasta cinco terrenos de los que dio el gobernador, Ricardo Gallardo, para las personas de escasos recursos. A ver si en el Registro Público de la Propiedad se dan cuenta de la tranza.
P.D.2.- Este lunes estrenamos Poder Judicial en San Luis Potosí, Sigo pensando que es el mismo infierno con distintos diablos. Al tiempo.
P.D.3.- Enrique Galindo, presidente municipal de la capital recuperó su militancia priísta, pero cada vez se ve mas guinda. El alcalde capitalino se dejó ver muy sonriente en fotografías con los morenistas durante la visita de la presidenta Claudia Sheinbaum. ¿A poco sí?
P.D.4.- Gran indignación causó en Matehuala la detención del octagenario, Carlos Siade Martínez, conocido empresario de la región. Resulta que hace algunos meses el hombre fue masacrado por un grupo de maleantes que se estacionaron en su cochera. El hombre fue cruelmente golpeado cuando solicitó a los fulanos que liberaran el acceso a su domicilio pero ahora está detenido porque, en defensa propia, le disparó a sus agresores que, por cierto, lo dejaron como santocristo. Una gracia más del corrupto delegado de la Fiscalía General del Estado, Pedro Martínez Perales.
Hasta la próxima.