Hoy es un día de celebración para las y los potosinos, pues se celebra al santo patrono de la ciudad, San Luis Rey de Francia. En la entidad se celebran fiestas en su honor.
San Luis Rey, también conocido como Luis IX o Ludovico Nono, fue Rey de Francia entre 1226 y 1270, se destacó por llevar una vida privada discreta y por ser un hombre de fe y oración. Fue coronado en Francia a la edad de 12 años y posteriormente contrajo nupcias con Margarita de Provenza en 1227. En el trono, Luis IX declaró su apoyo y eterno amor por la iglesia, por tanto, participo en la construcción de monasterios importantes por todo su reino.
Su incondicional amor por la iglesia católica le valió el respeto y la admiración de sus contemporáneos, al punto de ser considerado como “el ideal del monarca cristiano”. Es uno de los monarcas más memorables de la Edad Media. Su reinado es recordado como una edad de oro en el Medievo, en la que el Reino de Francia experimentó un apogeo político y económico.
El monarca también dio apoyo militar y político a la iglesia al momento de las cruzadas y aunque fue uno de los últimos en partir a oriente, se le conoce su participación en la séptima cruzada, miasma que no tuvo el gran éxito que se esperaba.
Luis IX murió en Túnez, víctima posiblemente de fiebre tifoidea, un 25 de agosto de 1270, a los 56 años de edad. Veintisiete años después, en 1297, fue canonizado por el Papa Bonifacio VIII, tras lo cual, diversas ciudades alrededor del mundo han adoptado su nombre.
Para los españoles que llegaron con la conquista de México en 1492, Luis IX era un hombre muy apreciado, por lo que en su honor decidieron llamar esta entidad con su nombre. Posteriormente, se agregaría el “Potosí” a San Luis, esto en un acto de comparación con las minas del Potosí en Bolivia, ya que eran similares en forma y ambos lugares contaban con depósitos de oro y plata.
A lo largo de la ciudad se pueden encontrar diferentes emblemas refiriendo a Luis IX, destaca la estatua encontrada en Plaza de los Fundadores.