La desaparición de Daniela Martell Orozco, una mujer de 44 años vista por última vez el 6 de enero en el barrio de Tequisquiapan, ha generado indignación no solo por la tragedia que enfrenta su familia, sino también por la manera en que la Fiscalía General del Estado ha manejado la investigación. Daniela, conductora independiente de la plataforma “InDriver”, conducía un Suzuki Swift 2021 rojo borgoña, con placas VCT-364-D, del cual tampoco se tiene rastro.
La fiscal general, María Manuela García Cázares, informó que se siguen tres líneas de investigación, incluyendo la relacionada con su exesposo y un examante. Sin embargo, destacó que la línea “más fortalecida” vincula a Daniela con la venta de drogas, un comentario que ha sido señalado como revictimizante por colectivos feministas, expertos en derechos humanos y la ciudadanía. Este tipo de declaraciones, además de carecer de pruebas contundentes, desvían la atención del objetivo principal: localizar a Daniela con vida y garantizar justicia para su familia.
La criminalización de una persona desaparecida no solo afecta la percepción pública de su caso, sino que también puede influir negativamente en la seriedad con la que se maneja la investigación. “Hablar de venta de drogas sin evidencia no es investigar, es estigmatizar”, señalaron integrantes del colectivo Voz y Justicia para Todas. En lugar de enfocar los esfuerzos en teorías que minan la reputación de la víctima, la Fiscalía debería priorizar el análisis técnico, como el monitoreo de cámaras de seguridad y el rastreo del vehículo.
Además, las declaraciones de la fiscal son un reflejo preocupante de un sistema que, en lugar de proteger a las mujeres desaparecidas, las responsabiliza de su propia desaparición. Esto no solo genera desconfianza en las autoridades, sino que también perpetúa la violencia estructural contra las mujeres, ignorando los estándares internacionales de debida diligencia en casos de desaparición.
Por último, familiares y amigos de Daniela hacen un llamado a la ciudadanía para que proporcionen información relevante al 444 204 0413 o al 444 811 3039. Su prioridad sigue siendo encontrarla con vida, mientras exigen un manejo responsable y profesional de la investigación.
La plataforma de transporte InDrive emitió un comunicado oficial respecto a la desaparición de Daniela Martell Orozco, usuaria registrada en San Luis Potosí. En su declaración, la empresa destacó su compromiso con la seguridad de su comunidad y afirmó que, tras una exhaustiva revisión interna, no se encontró ninguna relación entre la plataforma y los hechos ocurridos.
“En InDrive, la seguridad de toda nuestra comunidad es fundamental, por lo que rechazamos cualquier acción que atente contra la integridad física y psicológica de nuestros usuarios y de la ciudadanía en general”, señala el comunicado.
De acuerdo con la empresa, después de analizar la actividad de la cuenta de Daniela Martell, se confirmó que no hubo ningún registro de viajes el día de su desaparición ni en las semanas previas. Con base en esta revisión, InDrive aseguró que la conductora no estaba utilizando la plataforma ni prestando servicio al momento de los hechos.
Adicionalmente, InDrive informó que está colaborando con las autoridades encargadas de la investigación, proporcionando toda la información requerida para contribuir al esclarecimiento del caso.
La compañía expresó su solidaridad con los familiares y allegados de la víctima, lamentando profundamente la angustia que esta situación ha generado en la comunidad potosina. “Lamentamos profundamente la angustia que estos desafortunados hechos han generado en familiares, amigos y conocidos de la víctima y expresamos nuestra solidaridad con toda la comunidad potosina”, enfatizó.