Las intensas lluvias recientes en San Luis Potosí han ocasionado un retraso de aproximadamente quince días en algunas de las obras de infraestructura más importantes del estado, incluyendo la ampliación del bulevar Río Santiago y la controvertida Arena Potosí. Así lo confirmó el gobernador Ricardo Gallardo Cardona, quien aseguró que, a pesar del retraso, las entregas se realizarán en un plazo razonable y que las lluvias han sido beneficiosas para la región.
Las obras afectadas incluyen la ampliación del bulevar Río Santiago en su conexión con Palma de la Cruz y la construcción de la Arena Potosí, ambas fundamentales para el desarrollo de la infraestructura local. “Estas obras tendrán un retraso de hasta dos semanas en sus fechas de entrega programadas debido a las lluvias”, indicó el gobernador Gallardo Cardona.
El mandatario subrayó que el retraso es comprensible y aceptable considerando los beneficios que las lluvias han traído a la zona metropolitana. “Gracias a las lluvias, se han rellenado las presas y recargado los mantos freáticos, algo crucial para paliar los efectos del prolongado estiaje que ha afectado a la región”, explicó.
Gallardo Cardona enfatizó la importancia de las lluvias después de un año de sequía extrema, la más severa en los últimos 70 años en San Luis Potosí. “No puede haber queja cuando, desde hace más de un año, hemos estado pidiendo lluvias para enfrentar la sequía”, afirmó.
El gobernador no descartó que otras obras en ejecución también experimenten retrasos similares debido a las condiciones climáticas. Sin embargo, aseguró que estas interrupciones temporales son un pequeño precio a pagar por los beneficios a largo plazo que las lluvias traen a la región.
En relación a otras obras de infraestructura, el Consejo Consultivo Potosí advirtió que la construcción de la última etapa de la vía alterna a la carretera federal 57, para conectar con el eje 140, está perfilada para completarse en 2025. Esta obra es crucial para aliviar el tráfico vehicular hacia la carretera San Luis-Querétaro y mejorar la conectividad entre el sur de la ciudad y las zonas industriales.
El tramo pendiente, desde el eje 122, permitirá la creación de un bulevar con altas especificaciones, facilitando una alternativa de salida a la vía federal y ordenando el tráfico a través de circuitos. Actualmente, las únicas opciones de salida son el distribuidor vial Juárez y el Circuito Potosí.
A pesar de los retrasos, el gobierno de San Luis Potosí se mantiene optimista y comprometido con la finalización de estas importantes obras, asegurando que los beneficios a largo plazo superarán los inconvenientes temporales causados por las lluvias.
