Prepotente y abusivo
Grave situación es la que padecen los habitantes de Ahualulco ante el acoso del alcalde Federico Monsivais Rojas. Los constantes abusos de la policía municipal, son solapados e incluso, auspiciados por el edil quien ya es reconocido en toda la demarcación por su carácter despótico e intransigente. La población está atemorizada por los constantes incidentes sin que hasta el momento autoridad alguna sea capaz de frenar las bravuconadas del presidente municipal y su gente allegada.
Tal es el caso del despojo que han sufrido desde el mes de marzo varios locatarios del mercado municipal, construido por el ayuntamiento en el periodo de Juan José Jover Navarro. Recientemente, en el mes de junio, se realizó el desalojo de la mayoría de los locales en perjuicio de varios comerciantes que se encontraban instalados de manera legal, la acción fue realizada sin notificación previa y por un par de sujetos que no acreditaron su personalidad jurídica y son conocidos como “los plazeros”. Ante la ausencia de una dirección de comercio municipal, en nombre de la autoridad se apersonan Israel Vázquez Ramírez y Francisco Javier Contreras Esparza y sin competencia legal alguna, confiscaron los bienes y productos de varios locatarios que por su parte, sí acreditaron la posesión legítima del inmueble.
Los “plazeros” se auxiliaron de varios agentes de la policía municipal que con lujo de violencia sometieron a los indefensos ciudadanos. Cabe hacer mención que en la diligencia se encontraban presentes el secretario del ayuntamiento David Adrián Mendoza Jacobo y el síndico municipal José Luis Contreras Vázquez. También estuvo presente el director de seguridad pública Alejandro Salazar Fraga quien en todo momento procuraba burlas y comentarios soeces que atentaban contra la dignidad de las personas. Los afectados, se limitaron a exigir de manera verbal que se detuvieran las acciones hasta no aclarar con el alcalde, pero se consumaron los hechos ante la impotencia de los comerciantes.
Actualmente, los espacios del Mercado ya fueron ocupados por familiares del alcalde e incluso, la misma esposa del presidente municipal Josefina Martínez se apropió de un lugar y lo utiliza como oficina sin ser un espacio adecuado. Hasta el momento ninguna autoridad ha podido contener los atropellos, y los excesos del presidente municipal continúan con total impunidad. Ahualulco es un pueblo sin ley.
