Los Juegos Olímpicos promueven la inclusión y la igualdad entre los atletas, sin importar raza ni etnia. A pesar de la controversia en torno a Imane Khelif, su participación en París 2024 cumple con las reglas establecidas. La argelina venció a la italiana Angela Carini, quien abandonó el combate debido a la superioridad de su oponente, generando un debate sobre el género de Khelif.
Angela Carini comparó el nivel de Khelif con el de boxeadores masculinos, afirmando que nunca había recibido golpes tan fuertes. La confusión se debe a que Khelif, aunque nacida mujer, posee cromosomas XY y produce más testosterona. Esta condición genética llevó a su descalificación en el Mundial Amateur del año pasado, pero el Comité Olímpico Internacional confirmó su elegibilidad para competir en los Juegos Olímpicos.
Imane Khelif ya compitió en Tokio 2020, donde fue eliminada en cuartos de final. Su rendimiento demuestra que no es invencible y que cualquier rival puede superarla. Tras su victoria reciente, Khelif evitó la polémica y defendió su postura en redes sociales. Su próximo combate será crucial para su avance en el torneo.
