Al cumplirse dos años del triunfo electoral del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, no tiene nada que celebrar, pues su administración se ha convertido en un desastre que se vaticina en picada; sobre todo porque se desborda la inseguridad, hay más de dos millones de mexicanos en el desempleo, el sistema de salud es insuficiente y lo dicen la falta de medicamentos e infraestructura sanitaria, y qué decir de la educación que perdió muchos recursos en su gestión.
Rubén Guajardo Barrera, presidente de la Comisión de Justicia del Congreso del Estado de San Luis Potosí, estimó que es una pena que a través de sus redes sociales, el Jefe de la Nación, siga vanagloriándose con resultados como el combate a la corrupción y a la pobreza, cuando son pocas las figuras públicas detenidas por dañar a México y hay 52.4 millones viven en situación de pobreza, cifra que equivale al 41.9 por ciento de la población, según el propio Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, CONEVAL.
A través de sus redes sociales y en sus conferencias matutinas, el Ejecutivo ha estado dando avances de su informe, en donde justifica la caída de la economía mexicana y mucho se lo atribuye a la pandemia por Covid-19 que atravesamos, pero además predice que pronto acabará esta recesión económica, aún y cuando sin ser expertos en la materia, parece imposible.
“Vemos una fuerte irresponsabilidad de quien se supone es la cabeza de nuestro país, no cuenta con el apoyo de muchos de los gobernadores, que constantemente lo contradicen con sus políticas públicas inservibles, a muchos los ha dejado sin presupuesto y a la buena de Dios, no así a los emanados por el partido en el poder, pero qué decir del desasosiego en que nos encontramos por las balaceras y constantes ejecutados en las calles -tan sólo el día de hoy en San Luis Potosí, aparecieron dos en la capital del Estado-“.
El legislador del Partido Acción Nacional, PAN, pidió un acto de conciencia social al que lleva las riendas del país y no mienta a la nación sobre su pésimo trabajo, pues no ha conseguido cumplir con sus aspiracionales cien compromisos sociales a la nación en su segundo año de triunfo electoral, así tampoco nos ha llevado a la Cuarta Transformación que prometió.