Pese a todos los señalamientos que se han hecho, a través de publicaciones tanto en medios de comunicación como a través de redes sociales, las autoridades persistieron en llevar a efecto la feria del rebozo, aunque para no meterse en problemas, simplemente le quitaron el nombre y no instalaron el Teatro el Pueblo, pero todo lo demás estuvo en todo su apogeo, bailongos, venta de bebidas embriagantes, juegos mecánicos y venta de chuchería y media, que nada tiene que ver con una feria, una feria es para exponer los productos que produce la región, no venta de artículos chinos o de artesanías, dulces y demás que se elaboran en otros punto del país.
Es entendible, porque aquí, en Santa María del Río no hay industrias, las autoridades en lugar de atraer inversión para la creación de empleos, sobre la base de manufactura, simplemente se dedicaron a la supuesta promoción del turismo y, enfocaron sus baterías al turismo, turismo que cada vez es más escaso, por el mal trato que se ha dado a los visitantes, quienes a través de redes sociales han dado a conocer la forma como sus anfitriones los expoliaron.
Las denuncias públicas son fiel testimonio, no hay nada inventado. Y también el turismo tal vez se haya ausentado por la falta de una verdadera promoción. Pese a ser Santa María del Río un “Pueblo Mágico” poco o nada se ha hecho por brindar a los turistas algo más que una visita a la escuela del rebozo o a la panadería para ver cómo se hace el pan o bien, una sesión, de vez en cuando, del modelaje del rebozo y hasta ahí, párele de contar, ahí se acabó el ingenio para tratar de atraer más visitantes y haya derrama económica en la región.
Por cierto, se anuncia que, en la Dirección de Gobernación Estatal, se trabajaba en un proyecto de decreto para implementar “Ley Seca”, en todo el estado, lo bueno, para las autoridades locales es que ya para entonces la esa ley les haría los mandados, pues apenas entraría en vigor hoy. Habrá que estar al pendiente si, efectivamente se hace una realidad o bien solo fue una ocurrencia del Roberto González Rubio, mejor conocido como “El Robotito”, de quien, por cierto, se asegura ha otorgado permisos a diestra y siniestra, no solo en la actual administración de Juan Manuel Carreras López, pues no es la primera ocasión que ocupa la titularidad en ese lugar.
Si acaso, no hubiese habido feria en este lugar, no tendrían por qué haber enviado los camiones de pasajeros a las inmediaciones del Jardín de la Madre, como cada año se hace, porque la Plaza Martín Bautista, a donde llegan, se encuentran atestada de puestos, no solo los andadores, sino la calle, así es que se opta por lo más fácil; mandar los camiones a casi un kilómetro de distancia de su terminal y obligar a la gente a caminar, ahora ni modo que vayan a poner como pretexto que es para proteger las entradas de cera, las peregrinaciones, que ha sido su caballito de batalla durante todos los años, pero la realidad es otra, es el interés por el dinero que deja el permitir este tipo de eventos, intereses mezquinos que se antepusieron a la seguridad sanitaria de todo un pueblo.
Mientras siguen las quejas de habitantes de Ojo Caliente por el funcionamiento de una factoría enclavada en esa localidad, donde las emisiones contaminantes están a la orden del día, se puede observar las enormes columnas de humo que se levantan de esas instalaciones hasta desaparecer en el cielo.
Los vecinos se preguntan dónde estaban las autoridades cuando se instaló esa factoría, los tres niveles de gobierno fueron omisos; federal, estatal y municipal, a quienes aparentemente les valió un cacahuate el arriesgar la salud de la gente de esa comunidad.
