Desde el final de su campaña, el ahora alcalde de Tierra Nueva, maestro Rubén Rodríguez Rodríguez, cuando ya era Presidente Municipal electo, se mostró preocupado por el tema de salud. Prueba de ello fue la visita que realizó a las instalaciones del Cetro de salud, donde fue recibido por la directora de la misma, ahí supo de las carencias urgentes por ser atenidas, vio las condiciones en las cuales se encontraba la ambulancia, también fue enterado que solo había un paramédico, algo increíble, para una población de nueve mil habitantes.
En ese entonces se comprometió a brindar atención prioritaria a ese renglón., Sion embargo, no fue sino hasta que se presentó una eventualidad cuando de inmediato se abordó el tema, pues como es sabido, los adversarios políticos de Rodríguez Rodríguez, aprovecharon la coyuntura para cuestionar la falta de previsión, cuando bien podría haberse actuado de inmediato.
Total, la respuesta de las autoridades fue al día siguiente, cuando a través de un “en vivo”, el maestro Rubén Rodríguez no rehuyó al tema, pues fue el principal, y anunció la contratación de personal paramédico y un protocolo de reacción inmediata para presentarse a la brevedad cuando se presente alguna eventualidad, además de retomar el tema de la falta de insumos médicos.
Es de reconocer que actuó en la forma correcta y no eludir al tema, como se hizo en el pasado reciente, donde para no hacer gastos simplemente pedían se llamara a los paramédicos de Santa María del Río, para que apoyaran, argumentaban la falta de chofer de la ambulancia, gasolina o bien decían estaba descompuesta. Solo demostraban insensibilidad, fue la tónica. En fin, eso pasó y ahora solo queda ver hacia adelante, ver el futuro de Tierra Nueva, que merece una mejor suerte, retomar el rumbo perdido.
Se deben tocar puertas, las que sean necesarias, menos creer las falsas promesas de políticos, como el infumable Héctor Ramírez Konishi, de quien en su pasada gestión como legislador nada hizo por el municipio, solo se le vio en contadas ocasiones aquí en cabecera, solo se le volvió a ver cuándo andaba desesperado en busca de la reelección, la cual obtuvo sin problema, al tener el voto cautivo de los obreros, pues es dirigente sindical, o dicho de otra manera es de los que viven de la explotación de los trabajadores.
Ante la falta de trabajo legislativo, Ramírez Konishi tiene el trillado discurso de los priistas; culpar de todo lo malo al presiente Andrés Manuel López Obrador, lo más reciente que dijo, para tratar de justificar el baño de sangre que se ha dado, no solo en el territorio potosino, sino en el país, fue que la violencia, los muertos, son culpa del gobierno federal, por su fallida estrategia en material de Seguridad Pública, se olvida que el baño de sangre viene desde las administraciones de Felipe Calderón, Vicente Fox y Peña Nieto, en serio, su trabajo legislativo deja mucho que desear, solo se dedica a despotricar contra el presidente López Obrador, la verdad con ese tipejo no se debe esperar que haga algo bueno por Tierra Nueva.
Como hacía más de dos lustros no se miraba, la presa La Muñeca se encuentra como en sus mejores tiempos, prácticamente a su capacidad máxima, ahora solo resta esperar a que los usuarios, los que utilizan el vital elemento para el riego de sus sembradíos forrajeros, la utilicen con buen criterio y, antepongan el bienestar de la gente, es decir, den prioridad al abastecimiento del ser humano. Ya se pueden preparar los tradicionales torneos de pesca deportiva en ese vaso de captación y, por qué no, iniciar la infraestructura para la construcción de un lugar turístico, hay potencial, solo falta visón para explotarlo.
