Silvano Aureoles, gobernador de Michoacán, acudió este lunes a la sede de la Suprema Corte de Justicia en la Ciudad de México para presentar las pruebas que asegura tener sobre los vínculos entre el crimen organizado y el partido Morena. Esto ocurre luego de que hace una semana fue bateado por el presidente López Obrador, quien se negó a recibirlo en Palacio Nacional.
“Como me comprometí, me encuentro ya en la Suprema Corte para hablar con Arturo Zaldívar, en su calidad de presidente de este importante poder, responsable de aplicar la justicia en el país”, dijo Aureoles Conejo antes de ser atendido en la Suprema Corte.
El último gobernador del PRD aseguró a la prensa reunida en el lugar: “No me voy a cansar hasta que se reciban las pruebas que tengo en mi poder porque soy consciente de la gravedad de los hechos que ponen en riesgo el futuro de la nación”.
Y explicó que también entregará las pruebas al Senado de la República y a la Cámara de Diputados, y posteriormente se reunirá con el fiscal Alejandro Gertz Manero con el mismo propósito.
El pasado 24 de junio, anunció que denunciaría ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y el Gobierno de Estados Unidos, la presunta participación de bandas del narcotráfico en las elecciones intermedias del pasado 6 de junio.
Aureoles, quien concluirá su mandato de seis años el 30 de septiembre, acusó al presidente López Obrador de permitir la supuesta operación del crimen organizado para la coacción del voto en favor de candidatos de Morena, incluyendo desde luego al de su estado (Alfredo Ramírez Bedolla), el cual lo venció en las urnas.
