Por: María Luisa Paulín
Este domingo 2 de junio, los mexicanos estamos convocados, como se dice cada seis años, a la madre de todas las elecciones, sólo que, en ésta, sí nos estamos jugando valores fundamentales como la libertad y el derecho a pensar diferente.
Las opciones que hay para elegir al titular del Poder Ejecutivo de México recae en dos mujeres: Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum, ambas con capacidad demostrada, inteligencia y la oportunidad de trascender como la primera mujer presidenta del País.
Pero lo que se juega está más allá de que una mujer gane la Presidencia. Lo que está sobre la mesa es la continuidad de un estilo de gobernar autoritario, como el de Andrés Manuel López Obrador, que convierte en enemigo a todo el disiente de sus verdades y lo lincha públicamente; y una opción nueva que encabeza Xóchitl Gálvez, postulada por una coalición de viejos partidos, pero con carácter y decisión propias.
Las ofertas de ambas se desplegaron ampliamente, así que no hay pretexto para decidir y salir a votar el 2 de junio.
Los escenarios que se dibujan en San Luis Potosí son siempre caprichosos y casi siempre, nuestro estado tiene un comportamiento diferente al resto del país. En el pasado se decía que los potosinos éramos los favoritos para hacer experimentos.
De un tiempo a la fecha, el comportamiento electoral es claramente opositor a la cuatroté. Aquí los ciudadanos prefieren al PAN o al PRI, pero no le dan su gracia a MORENA; tan es así que tras la cascada que significó Andrés Manuel López Obrador en el 2015, no ganaron posiciones locales importantes.
Las diputaciones federales que hoy ostentan se las dio el Partido Verde, que en 2018 con todo y la burda alianza mafiosa que hicieron el gobernador, Juan Manuel Carreras y el dirigente de MORENA, Mario Delgado, pudieron vencer a Ricardo Gallardo Cardona.
Morena, en su muy particular estilo pendenciero. no logra construir estructura electoral porque se convirtieron, como casi todos los partidos que llegan al poder, en caníbales compulsivos.
El Verde, en cambio, tiene una organización disciplinada que trabaja como relojito, así que estos aliados incómodos tendrán que anteponer a sus filias y fobias el interés superior sobre el que descansa su futuro político.
Al margen de ello, más les vale a ambos partidos que no provoquen condiciones de tensión porque en el pecado van a llevar la penitencia.
Nos vemos el domingo.
P.D.1.- Peligroso, muy peligroso que el Mirrey huasteco, de nombre Gerardo Sánchez Zumaya, haga uso de la Guardia Nacional para cobrar venganzas personales, como lo hace en los municipios de San Vicente y Tanquián, en la Huasteca potosina. Está claro que el señor quiere ser candidato a gobernador por Morena para el 2027, pero se necesita más que bravuconadas para eso. Ahorita tiene de muestra muchos tompiates, porque con agua, dinero y tractor, cualquier güey es agricultor. ¡No pos guau!
P.D.2.- La Contraloría del Estado está buscando a la exfuncionaria de la SEDUVOP para que enfrenten procesos administrativos, pero como no los encuentra ha decidido darles su derecho de audiencia a través de edictos. ¡Zaz!
P.D.3.- Tamasopo, Cárdenas y El Naranjo son los municipios que concentran toda la atención de las autoridades. Nadie quiere que los pistoleros se anden paseando por las casillas receptoras de votos mientras los ciudadanos acuden a votar.
P.D.4.- Pónganse truchas con sus cuentas de WhatsApp, porque últimamente hackearlas es el deporte favorito de los ciberdelincuentes.
P.D.5.- Palomita para el arzobispo, Jorge Alberto Cavazos, el jerarca católico se ha convertido en el referente de mayor calidad moral y política en territorio del Potosí y no sólo por la firma del acuerdo de paz con los candidatos a la Presidencia municipal de la capital de San Luis Potosí. Palomita, pues, para el señor arzobispo.
Hasta la próxima.
